La incontinencia es la incapacidad para retener gases o heces por un fracaso en la capacidad de contracción de los esfínteres del ano.
El origen principalmente es por dos motivos:
- Por una perdida de tono (fuerza) de los esfínteres secundaria a medicamentos, asociado a algunas enfermedades, dilataciones o esgarros del ano.
- Por rotura de los esfínteres, la mayor parte de las veces secundaria a traumatismos, lesiones en el parto (por dilataciones o episiotomía con desgarro) o cirugía previa de ano (fístulas o hemorroides).
El diagnóstico correcto se hace por medio de una «manometría del canal anal» que mide el tono (fuerza) y la capacidad contráctil de los esfínteres.
El tratamiento varia según sea la causa de la incontinencia :
- Si hay una perdida de fuerza pero los esfínteres están completos, se debe tratar la causa si esta es medicamentosa o por enfermedad y la realización de una serie de ejercicios de rehabilitación de esfínteres, en algunos casos auxiliado por el «bio-feedback» que nos ayuda a identificar el esfínter dañado y potenciar su rehabilitación.
- Si la causa es por rotura de esfínteres, el tratamiento es quirúrgico encaminado a la reconstrucción y sutura de los esfínteres dañados. Requiere de anestesia general o loco-regional, una preparación previa del colon, tratamiento antibiótico e ingreso de tres a cuatro días. Posterior a la cirugía se suele recomendar ejercicios de rehabilitación de los esfínteres.
- En algunos casos en que la lesión de esfínteres es muy extensa o una enfermedad de base que sea imposible la reconstrucción o rehabilitación de los esfínteres, hay prótesis que los sustituyen aunque su resultado no es siempre del todo satisfactorio.
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