La clasificación se suele realizar  en mayor medida en función del aspecto que tiene la fisura que del tiempo de evolución, aunque algunos expertos consideran que después de 8-12 semanas de evolución las fisuras se deben considerar cronificadas.

Por lo tanto, hablaremos de dos tipos de fisuras anales en función del tiempo de evolución. Primero, fisuras agudas que se caracterizan por ser un desgarro superficial de bordes limpios. Segundo, fisuras crónicas cuando existen antecedentes de dolor de aproximadamente 4 semanas de evolución. Las fisuras crónicas se caracterizan por ser un desgarro profundo con una úlcera de bordes idurados, en cuyo lecho se pueden apreciar las fibras del enfínter anal interno y generalmente acompañado de un pliegue cutáneo indurado en el extremo distal (hemorroide centinela) y una papila hipertrófica en el borde proximal (pólipo de Lane).
_______________
Para más información, visita la web de Centro Proctológico

Share This

¿Te ha gustado esta noticia?

Compártela con tus amigos